Por fin se encontró la solución para el tema: «Me gusta que me regalen flores, pero luego me da mucha pena porque se mueren y hay que tirarlas…».
Ese es uno de mis problemas existenciales cada vez que me regalan flores, pero gracias a mi amigo he visto la luz a mi problema cuando me pidió que le hiciera 5 amapolas para regalárselas por su 5º aniversario a su pareja.
Entonces es cuando vi lo bueno de que te regalen flores, si te las dan galletizadas… luego te las vas a poder comer!!!
Estoy quedando como una golosa total, pero es que es así… para ir a la basura y que tengan que desaparecer, que se puedan comer y que desaparezcan mejor en mi tripa.
Pues a lo que iba…
Que cuando me pidió unas amapolas (y con lo que yo quiero a esta pareja!), tenía que hacerles una cosa bien bonita. Pensé que en 2D iban a quedar algo raras las flores, con lo que me decidí a hacerlas en 3D. Así podría estrenar mi alfombrilla para modelar pétalos que me compré con la idea de empezar a practicar en cuanto pudiera con ese tema.
Busqué un tutorial para hacer amapolas… Este de «Supertartascaseras» está muy bien y aunque no tengas cortador de pétalos ni texturizador de pétalos da igual. Esas cositas las hice yo a mano y quedan igual de apañás (cortando a mano y rayando con la esteca plana los pétalos).
Mi problema llegó con el tema … NO TENGO DONDE DAR FORMA A MIS FLORES!! (Ese cacharro no me lo compré). Pero aquí la imaginación y el remedio casero me solucionaron el problema. Cogí la media docena de huevos que tenía en la nevera, las puse en la huevera y me quedé con el cartoncito que contiene los huevos. Puse un poco de plástico transparente sobre él, para que no se ensuciaran mis pétalos de fondant y… TACHAN!!
La verdad es que funciona, los dejas ahí a ser posible de un día para otro para que endurezcan bien y luego salen con esa formita.
Entonces ya los puedes poner sobre la galleta (haciendo primero un pequeño tallo en fondant verde y haciendo una bolita roja humedecida con agua para que pegue bien el grupo de pétalos a la base de la galleta. Se le añade por último el centro negro (que pena no haber tenido colorante en polvo negro para añadir mas matices al centro de los pétalos)
Si no tienes muy claro de que vayan a aguantar bien los pétalos (los hemos toqueteado un poco y pegado a la galleta) pues les pones unas bolitas de papel de plata en la base para que aguanten la forma y los tienes unas cuantas horas mas en esa posición, así te aseguras que no se abrirá en exceso la flor.
Y este es el resultado final, unas flores con volumen y totalmente comestibles. Para celebrar 5 añitos de felicidad.
Empaquetar esto fue un dilema, pero al final encontré la solución…. ¿Quedará alguna viva?