El otro día probé con una receta de Cupcakes porque me apetecía empezar a practicar con las mangas pasteleras. Además iba a ser la segunda vez que hacía, Puri tiene mas experiencia en estos menesteres reposteriles, con lo que me busqué una receta que me asegurara no fallar. Y la encontré en el Blog de Alma’s Cupcakes: Unos cupcakes de vainilla.
Otro de mis retos era hacer una buttercream con la que cubrirlos para así trastear con las mangas (mi experiencia anterior fue un poco «reguler») , así que opté por una que me parecía deliciosa como adicta al chocolate blanco que soy: Buttercream de chocolate blanco.
Y para el relleno de los cupcakes?? Que le pegaba a esto….? Pués confitura de fresa era una opción estupenda. Así que me hice con los ingredientes necesarios y me puse manos a la obra. Vamos a ver qué necesitáis para hacerla.
Cupcakes de Vainilla rellenos de confitura de fresa ( 12 cupcakes medianos):
- 100 g harina
- 1 cucharadita de levadura química (Royal)
- 100 g azúcar
- 100 g mantequilla (a temperatura ambiente, 1 hora fuera frigo)
- 2 huevos (a temperatura ambiente)
- 2 cucharadas de leche
- 1 cucharadita y media de esencia de vainilla
- Confitura de fresa
Preparación:
- Precalentad el horno a 180º.
- Preparar la fuente de cupcakes con 12 papelitos de cupcakes. (Suelen tener esas unidades las bandejas)
- En un robot de cocina pon el accesorio mezclador, corta la mantequilla en trozos pequeños y bátela en el robot.
- Incorpora el azúcar a la mantequilla cuando esta esté bien batida. Mezcla hasta que ambas tengan una textura cremosa.
- Añade los huevos batidos, las cucharaditas de esencia de vainilla y a continuación la harina mezclada con la levadura química.
- Por último, cuando todo lo anterior esté bien mezclado, añade la leche.
- Reparte la mezcla entre los papeles para cupcakes con la ayuda de una cuchara. IMPORTANTE: No rellenes los papeles hasta arriba si no quieres que te queden como las magdalenas de toda la vida . Los cupcakes son mas bien planos y no han de quedarte tan altos como una magdalena. Para ello rellena sólo 3/4 partes del papelito
- Hornea unos 15 minutos o hasta que al pincharlos con un palillo este salga limpio, a partir de ese tiempo id echándole un ojo, ya sabéis que cada horno es un mundo.
- Dejad que se templen unos 5 minutos antes de sacarlos del molde metálico, después pásalos a una rejilla para que se vayan enfriando.
- Una vez fríos llega la parte divertida… decorarlos con buttercream o fondant.
La verdad es que no tiene misterio ninguno y en apenas media hora tendréis una bandeja de cupcakes que huelen de maravilla en vuestra cocina. Además están muy ricos y esponjosos.
Para poder rellenarlos por dentro yo usé el truco del «descorazonador«: Seguro que en casa tenéis un saca corazones para la fruta, pues ese mismo nos sirve para hacer un agujerito en el centro del cupcake (sin llegar hasta el final) y sacar como un pequeño taponcito de bizcocho. En el agujero que hemos creado metemos el relleno, en este caso la confitura de fresa, y cogemos el taponcito de bizcocho que hemos quitado y lo volvemos a poner en su sito. Y ahí no ha pasado nada jeje! Tan solo que ahora llevan sorpresa por dentro 🙂
Esto lo hacemos antes de pasar a decorarlos con la buttercream (crema de mantequilla) o el fondant (pasta de azucar). Veamos cómo se hace la Buttercream de Chocolate Blanco.
Necesitaréis los siguientes ingredientes:
- 250 gr de mantequilla sin sal
- 250 gr de azúcar glas ( tamizado con un colador o tamizador si tienes)
- 100 gr de chocolate blanco
- cucharada y media de postre de esencia de vainilla
- 1 cucharada sopera de leche semidesnatada
Preparación:
- Tenemos que tener la mantequilla a temperatura ambiente antes de hacer la buttercream. Tiene que estar blandita la mantequilla (no vale hacer trampa con el microondas… saldrá mal)
- Derretimos el chocolate blanco en el microondas o al baño maría. No es necesario que quede totalmente líquido, cuando esté cremoso lo retiramos y dejamos templar .
- En el bol del robot de cocina con el accesorio mezclador ponemos la mantequilla cortada a dados junto con el azúcar glass, la esencia de vainilla y la cucharada de leche.
- Batimos a una velocidad baja durante un minuto. Podemos entonces subir un poco la velocidad y batir durante un par de minutos a velocidad media/alta, el color de la buttercream será mas claro.
- Es el momento de añadir el chocolate blanco, que debe de estar prácticamente frío. Batimos durante otros 2-4 minutos a una velocidad media-alta. La buttercream tendrá la consistencia adecuada cuando veamos que hace picos… como si hubiéramos montado unas claras. Es importante batirlo bien.
- Como yo iba a usarla en unos cupcakes que iban rellenos de fresa decidí ponerle algo de colorante rojo (lo hice en el paso 5 cuando añadí el chocolate blanco). Así tomaron un tono rosáceo (para lograr un rojo es necesario poner un montón, de todos modos ese no era mi objetivo.)
Y ya tenéis lista una buttercream para trastear con las mangas pasteleras y dar formitas. Yo estuve maquinando un rato e hice todas estas pruebas.
Luego hice varias pruebas de decoración, os lo enseño…. aquí la imaginación al poder.
Cupcakes decorados con bolitas de Chocolate crujiente
Con corazones de fondant y corte transversal
En la foto anterior podéis ver el hueco que deja del descorazonador y como el relleno de fresa queda dentro… De verdad que están deliciosos!!!
Y por último os dejo con la foto del resto de cupcakes que decoré con figuritas de animales en fondant. En este otro post podéis verlas con mas detalle.
Decorados con mini figuras de fondant
Espero que pongáis en práctica la receta y disfrutéis de un buen cafetito o té en compañía de estos deliciosos cupcakes de vainilla rellenos de fresa con buttercream de chocolate blanco (por dios! que pierdo el aliento con lo largo que es el nombre de la receta jejeje!)
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